Por: Señorita Pepis / diciembre 2014
Una fría tarde la del funeral en memoria de la querida XVIII duquesa de Alba Cayetana Fitz-James Stuart, en Madrid, que contrastaba con la cálida y multitudinaria despedida de sus vecinos sevillanos. El funeral tuvo lugar el lunes en la basílica de San Francisco el Grande de la capital de España, ciudad en la que nació la duquesa. Ha sido más institucional, más formal, seguramente menos del gusto de la aristócrata desaparecida.
Cayetana, 88 años vividos felizmente, falleció el 20 de noviembre en su casa de Sevilla, su adorado Palacio de Dueñas. Apenas un mes después, unas 700 personas, entre familiares, amigos y numerosas personalidades de todos los ámbitos, han acompañado a los seis hijos y nietos de la duquesa para volver a rendirle el último público homenaje.
Los Reyes eméritos han presidido el funeral. Desde la abdicación del Rey han aparecido hasta en cuatro ocasiones juntos en público en las últimas semanas para cumplir con su agenda oficial, aunque lamentablemente dos de estos encuentros han tenido que ser funerales, uno el de la reina Fabiola de Bélgica y ahora este de la Duquesa de Alba.
Los reyes Don Juan Carlos y Doña Sofía se mostraron cariñosos entre ellos, fueron recibidos entre vivas y aclamaciones por parte del público que se congregó delante de la basílica, por el viudo de la duquesa Alfonso Díez, la alcaldesa de Madrid, Ana Botella y Carlos Fitz-James Stuart que hereda el título de Duque de Alba y por el resto de sus hijos y algunos nietos. Este segundo funeral lo ofició el cardenal emérito de Sevilla, Carlos Amigó, que también ofició el primero.
El Rey, en general con aspecto triste, le sonrió y dio el brazo a Alfonso Díez para que le ayudara a subir los escalones cuando se dirigían al interior de la basílica, que estaba a rebosar. La Reina también se apoyó en Carlos Fitz-James y multitud de amigos tuvieron que seguir la ceremonia de pie pese que se habían habilitado más asiento de los que suele tener el interior de la iglesia.
Muchas muestras de cariño por parte de los reyes a los familiares. La reina Sofía intentaba consolar a Eugenia Martínez de Irujo la única hija de la fallecida que era un mar de lágrimas, no paró de llorar en toda la ceremonia, estuvo inconsolable la pequeña del Alba ya que tenía una relación muy estrecha con su madre. Cayetano totalmente recuperado de la operación a la que fue sometido en Sevilla, antes de comenzar el oficio intercambiaba confidencias abrazado a Alfonso Díez, de todos los hijos es el que se muestras más afectuoso con el viudo y protagonizaron algunas escenas entrañables. El jinete, dicen que era el hijo preferido de la fallecida, estuvo acompañado de Melani Costa a la que no habíamos visto durante el funeral de Sevilla (porque la nadadora estaba concentrada) aunque se especulaba con un posible distanciamiento de la pareja, no es así.
El resto de hijos como Jacobo, duque de Siruela y la ex modelo y presentadora Inka Martí, quizás los que mantenían más distancia con la duquesa, también se mostraron muy tristes durante toda la ceremonia.
Isabel Preysler, todavía apesadumbrada por la muerte de su marido, habló brevemente con la reina, dicen que le dio las gracias por el interés que demostró por ella durante la enfermedad y posterior muerte de Miguel Boyer, estuvo acompañada de su hija Tamara Falcó; su padre Carlos Falcó, marqués de Griñón, Jaime de Marichalar, El cantante Raphael y Natalia Figueroa, Cayetana Guillén Cuervo, Massiel, Tomas Terry y Nati Abascal, muy rejuvenecida y elegantísima, la diseñadora Adriana Carolina Herrera, Simoneta Gómez Acebo, la princesa Tessa de Baviera, el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel García Margallo , el presidente del Senado, Pío García Escudero y muchos más acompañaron a la familia.
Se echó en falta la presencia de la íntima amiga de Cayetana, Carmen Tello y su marido el torero Jaime Ostos (aunque sí estuvo el amiguísimo de Tamara Falcó, Enrique Solís Tello), parece que la distancia con los hijos de su amiga puede ser insalvable y por supuesto, otra notoria ausencia, fue la de Genoveva Casanova (aunque sí han asistido sus hijos) fuera de la casa de Alba dicen, que a raíz de su supuesta relación con el ex ministro José María Michavilla.
Alfonso Díez ya no vive en Sevilla, parece que ha regresado a Madrid. Grandes cambios para el final de un ciclo en la Casa de Alba. Veremos ¿qué o quiénes se quedarán por el camino?