Por: Señorita Pepis / marzo 2016
El té es una bebida originaria de China que, según la historia descubrió el emperador Shen-Nung allá por el año 2737 a. C. La leyenda explica que mientras hervía agua a la sombra de un arbusto silvestre cayeron algunas de sus hojas en el recipiente, su aroma le despertó la curiosidad de probarlo, y al ingerirlo, se sintió reconfortado, (y digo yo… ¿por qué un emperador chino hervía agua debajo de un arbusto?. Desde entonces es una las bebidas más populares de China y una de las más consumidas del mundo.
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Por otro lado, en la India, también nos explican una leyenda muy atractiva en la que el protagonista es el monje Bodhidharma, que llevó el budismo a la China y fundó la doctrina Zen. Este, se propuso estar diez años meditando, pero como los párpados se le cerraban decidió cortárselos para así seguir despierto, del lugar donde cayeron los trozos cortados surgió la planta de té. A partir de entonces los discípulos del maestro instituyeron el rito del té, que conseguía evitar el sueño y el cansancio que les producían las largas horas de meditación.
Bueno, la historia tiene eso que como no estábamos allí no sabemos qué hay de verdad en lo que nos explican, pero lo cierto es que el té proviene de la Camelia sinensis y en función del tratamiento y elaboración de la planta se divide en cuatro grupos, blanco, negro, verde y rojo y es muy beneficioso para la salud.
En España somos más de café pero cada día se consume más té, hasta el punto que puede superarlo pronto. De momento, está bastante implantado, y cuenta con locales especializados donde podemos tomarlo y comprar una gran variedad de sabores a granel, además de adquirir tazas, teteras etc.
Uno de estos locales que está de moda es el Tea Shop, la primera cadena española desde 1991 en venta de té fresco. En estos primero días de primavera la firma ha sacado al mercado una nueva mezcla inspirada en los mayores atractivos de la Provenza, los campos de lavanda que tiñen de color lila y violeta los valles de la región.
El nuevo sabor se llama Rooibos La Provence, rico en minerales y vitaminas y sin teína. Una mezcla tonificante e isotónica de flores de lavanda y malva con grosella negra y hojas de mora, dejando un sugerente aroma que nos recuerda a los pueblos y campos llenos de vida y color del sur de Francia.
Pero hay otros que a mí también me encantan, porque como dijo W. Gladstone “Si tienes frío, el té te calentará. Si tienes calor, te refrescará, Si estás deprimido, te animará. Si estas excitado, te calmará”. Así que “Nunca encuentro una taza de té lo bastante grande o un libro lo bastante largo para saciarme”. CS Lewis
Gracia Blan Green
Ligera y refrescante mezcla de Té Verde aromatizada con vainilla, corteza de naranja, pétalos de rosas, de aciano y de girasol. En este Blend de la casa destacan las tonalidades más cítricas y florales, suavemente envueltas por la vainilla. Rico en antioxidantes es muy apropiado para iniciarse en el Té Verde, tanto frío como caliente. También disponible en base de Té Negro, Rojo, Blanco y Rooibo
Pakistaní
Una estrella de la casa Tea Shop: Té Negro con una mezcla de especias: cardamomo molido, trocitos de canela, clavo, vainilla y aroma. Una infusión fuerte, de sabor cálido y dulce. Energizante y rica en teína.Deliciosa con leche y azúcar, al estilo hindú.
Dream Tea
Té Verde con una sutil y sorprendente mezcla de flores de aciano, malva arbórea, girasol, y pétalos de rosas. Es tan aromático que resulta delicioso tanto caliente como frío. Ligero y rico en antioxidantes, con un suave efecto diurético.
Moruno
En una excelente base de gunpowder se combinan la intensidad de este té con el frescor de las hojas de menta hierba buena y aceite de menta. Es la bebida más popular del desierto y la idónea para combatir el calor y la sed. Tómalo muy dulce y caliente como manda la tradición, o bien helado para sentir todo su efecto refrescante.
Earl Grey
El té perfumado más famoso del mundo, significa Conde Grey y se dice que fue mezclado por un mandarín chino para dicho personaje que ocupó el cargo de primer ministro británico en agradecimiento por haber terminado con el monopolio de la Compañía de las Indias Orientales.